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Don Bernardo Soto era el presidente de la República y había tomado la resolución de separarse del poder, para imponer al candidato Ascensión Esquivel, que era el segundo designado a la presidencia de la república, es decir, como un vicepresidente actual. Las elecciones primarias ya se habían realizado y favorecían al candidato de oposición José Joaquín Rodríguez. Para ese momento, el pueblo de Costa Rica ya se interesaba en la política y no acepto que le impusieran un presidente, sino que exigía que se respetara el resultado electora. Los Hechos Se organizó entonces el pueblo y la noche del 7 de noviembre un ejercito de 7 mil hombres, armados con palos y machetes, puso sitio a la ciudad de San José, al mando de Rafael Iglesias. Don Bernardo Soto, en lugar de desatar la guerra, abandona el poder en manos de don Carlos Duran, que era el tercer designado a la presidencia de la República. El doctor Durán gobernó durante seis meses, hasta que tomo el poder el presidente electo, José Joaquín Rodríguez. Aunque después de este fecha se dieron nuevos fraudes electorales e incluso dictaduras, se considera el 7 de noviembre como día de la democracia costarricense, porque fue la primera vez que el pueblo se levanto en armas para exigir que se respetara su voluntad. |
